No muchas historias de animales marinos atrapados en redes acaban como esta.
Los buzos Cameron Dietrich y Colin Sutton habían salido a pescar atunes en la costa de México cuando se percataron que una tortuga marina estaba atrapada en una red.
Dietrich acudió de inmediato a su rescate, liberándola de las cuerdas atascadas en su aleta izquierda. Una vez liberada, la tortuga nadó lejos, pero luego, para sorpresa de los dos buceadores, se devolvió acercándose, por un momento increíble, se mantuvo centímetros por encima de él en el agua, lo suficientemente cerca como para que Dietrich pudiese extender la mano y sostenerla. Era casi como si la tortuga estuviese diciendo gracias.
La institución World Wildlife Fund considera la pesca humana como la mayor amenaza para las tortugas marinas en todo el mundo. Las tortugas marinas están en peligro de extinción, por lo que es necesario que todos, desde pescadores recreativos hasta pescadores comerciales, ayuden en su rescate. Y con un poco de suerte, podríamos volver a tener momentos como éste.